Los que la han sabido hacer, los cuales han vislumbrado un horizonte en materia fiscal, en comercio exterior y en los demás servicios que ofrecen, son los profesionales de Baker Tilly, guiados por Manuel Aguilar.
En épocas de crisis por pandemia, por los altibajos en las economías del mundo que pegaron a la nuestra, entre otros factores, Baker Tilly ha sabido manejar los dineros y sus inversiones.
El resultado de esto brilla más que el oro, pues la prestigiosa publicación International Accounting Bulletin, en su edición de octubre, la reconoció como la octava firma más grande de México. Pero ¿cómo lo lograron? Su filosofía fue la siguiente: “Las metas se cumplen con disciplina, orden y esfuerzo”.
Cambiaron para crecer e hicieron su convención estratégica. Los ahí reunidos conversaron sobre el rumbo de la firma, los planes para abordar los mercados estratégicos, la transformación digital y las acciones de comunicación para brindar servicios profesionales de primera a un mayor público —compañías, corporaciones y contribuyentes— precisamente en los actuales tiempos de mayor cumplimiento en los distintos temas de las empresas.
Enhorabuena a sus líderes Manuel Aguilar, socio director; Pedro Canabal, socio de comercio exterior e impuestos; Eliel Amaya, socio director de comercio exterior e impuestos; Adrián Bueno, socio director legal; Eduardo Marroquín, socio director de impuestos; Ramiro Ávalos, director de oficina y socio de impuestos, así como a todas y todos sus profesionales.